EL CHALTÉN - EL CALAFATE

Ahora sí, al día siguiente partimos para El Calafate.

El día hermoso, con calor, sin viento y sol radiante, hizo que sigamos de largo rumbo al Glaciar.

Era domingo a la tarde y no podíamos creer la cantidad de gente que había.

En las pasarelas, además de los turistas, estaban los habitantes de El Calafate con el mate y las facturas, tomando sol y haciendo picnic. Una romería.

Fotografiamos varias rupturas.

En la siguiente, se incluyen solamente cuatro imágenes de las catorce tomas que obtuvimos.

De otra caída también logramos varias tomas sucesivas, una de las cuales se incluye a continuación.

Al día siguiente queríamos hacer una excursión que organizaba la Estancia “Alice”, que consiste en ascender el Cerro "Frías".  Este cerro tiene una ubicación privilegiada que posibilita que desde su cima se tenga una vista panorámica de 360 grados.

Existían dos modalidades para ascender el cerro: a pie, preferida por Nora y los chicos pero imposible para mis ampollas y a caballo, siendo yo el único partidario de la misma.

Luego de muchos cabildeos y consultas, tanto en la agencia de turismo como en la Estancia, decidimos hacerla a caballo. Sería la primera vez que cabalgarían e iríamos con un guía.

Se agregó otro participante: un joven brasileño bastante piola.

Debo reconocer que los caballos eran muy dóciles pero también debo reconocer que transitar por bosques bajos, desfiladeros y luego la bajada empinada, no es la manera más conveniente de andar por primera vez a caballo.

Cuando falta muy poco para la cima, dejamos los caballos atados y recorrimos los últimos cientos de metros a pie.

La vista desde la cima es excelente: se ven las Torres del Paine, el Lago Argentino y el Fitz a lo lejos.

El guía se quedó con los animales y en un refugio de troncos donde tenía escondida una parrillita, improvisó unos inolvidables sandwiches de churrasco. Bebidas: jugo y vino para los adultos. Postre: chocolate o fruta.

Como el joven que nos acompañaba debía tomar el avión y disponía de poco tiempo, cortamos camino haciendo un recorrido más empinado y divertido.

Es una excursión económica altamente recomendable.

Después de haber subido al cerro "Frías", la próxima vez que vayamos a El Chaltén, Nora, Javier y Pablo no van a poder oponer resistencia a realizar la cabalgata a la zona de la Loma del Pliegue Tumbado argumentando inexperiencia.