RIO GALLEGOS - CABO VIRGENES

 EL CALAFATE

A la ma�ana siguiente recorrimos la ciudad, desenganchamos el trailer dej�ndolo a buen resguardo y partimos rumbo sudeste para pisar esa  �puntita del mapa� que representa el extremo m�s austral del territorio continental argentino, donde se unen el Atl�ntico y el Estrecho de Magallanes. Es la zona de Cabo V�rgenes donde resultan imperdibles las visitas al Faro de la Armada Argentina, el monumento que recuerda a la antigua ciudad �Nombre de Jes�s� y la Ping�inera.

En �sta �ltima, esa tarde est�bamos el guardaparque, tres turistas italianos con el gu�a de la Estancia �Monte Dinero�, nosotros y cientos o miles de ping�inos magall�nicos.

Son esos momentos que uno nunca olvida, donde se siente libre y disfruta del sonido del viento, el azul del mar y el graznido de los ping�inos. � El sonido que emiten los ping�inos se llama graznido ?.

Pareja de Ping�inos Magall�nicos	Pichones de Ping�inos (por su pelaje todav�a sin ir al mar)

Ah� los chicos pudieron ver como se materializa en el terreno la l�nea demarcatoria entre los Estados, en este caso a trav�s de hitos y de un alambrado doble. Son dos alambrados de m�s o menos un metro de altura separados entre s� una distancia de un metro.

Siguiendo el recorrido del l�mite, se llega al Faro de Punta Dungeness (CHI).

Sobre el Estrecho pueden verse numerosas plataformas mar�timas que extraen petr�leo.

Cuando volv�amos desde el Cabo, decidimos entrar a visitar la Estancia �Monte Dinero� que hab�amos visto en una emisi�n del programa �En el Camino�, en la cual se hab�a implementado la modalidad de arriar el ganado ovino con motos de cross y que adem�s brindaba, con reserva previa, servicios tur�sticos.

Si bien no ten�amos reserva, con la habitual hospitalidad t�pica del interior de nuestro pa�s y viendo que se trataba de un grupo familiar,  nos permitieron entrar. Eran m�s o menos las 17 hs y aunque dispon�amos de poco tiempo, cuando nos ofrecieron tomar un t� con tortas, masas y alfajores, respondimos �Siiiii�, al un�sono.

Mientras nos contaban la historia de la Estancia y ve�amos objetos y fotos antiguas de la familia, los chicos reconocieron a los turistas italianos que hab�amos visto en la ping�inera. Aprovechando que alguna vez aprend� algo de la lengua del Dante,  enseguida empezamos a conversar.

Para nuestra sorpresa, uno de los italianos era aficionado a la magia y ah� nom�s, nuestros hijos fueron el afortunado p�blico de unos cuantos trucos.

Lamentando lo r�pido que pasa el tiempo cuando uno disfruta momentos lindos, emprendimos el regreso a R�o Gallegos.

Antes de partir para �El Calafate, visitamos Punta Loyola, lugar que no nos gust�.

El asfalto de la RP 5 en el tramo RN 3 - El Calafate estaba en muy mal estado pero los aproximadamente 300 km se hicieron bastante r�pido. Nos detuvimos en Esperanza (140 km), para ver cu�nto hab�a cambiado desde el a�o 1985 en que pasamos por ah� en micro como parte del tour del ACA. En ese entonces, el camino era de ripio, Esperanza era parada obligada y solamente se ve�a la estaci�n de servicio, el Juzgado de Paz, no recuerdo si estaba el destacamento policial y pr�cticamente nada m�s.

Ahora hay estaci�n de servicio, polic�a, hotel, restaurante y campamentos de Vialidad ya que estaban asfaltando la ruta que sale hacia Torres del Paine (CH).

Respecto al estado del pavimento en el tramo citado, estimo estar� reparado ya que en el 2002 se estaba trabajando sobre la ruta.

Llegamos a El Calafate, al cual lo notamos demasiado cambiado desde 1985. Mucho m�s grande, extendido y con construcciones que no le agregaban belleza al lugar, sino todo lo contrario. Ni hablar de los altos precios, que muchos comerciantes atribu�an a los costos del transporte. Me comentaban que la cosa iba a cambiar cuando tuvieran el aeropuerto. Volv� en a�os posteriores y con aeropuerto inaugurado los precios siguieron igualmente altos.

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