VILLA UNIÓN - TALAMPAYA - ISCHIGUALASTO - VILLA UNIÓN

Lunes 13 de febrero

Luego del desayuno tomamos la ruta 76, asfaltada,  con rumbo sudeste para ir a visitar el Parque Provincial Talampaya.

Para visitar el Parque las posibilidades de alojamiento se reducen a San Agustín de Valle Fértil si se viene desde San Juan o Villa Unión si se viene desde el norte.  

Luego de recorrer 55 km se accede al camino de ingreso al Parque, donde en el puesto de Guardaparques se debe abonar una entrada (hay descuentos para jubilados, estudiantes secundarios, etc) y continuar por un camino asfaltado 17 km con rumbo este hasta llegar próximo a los murallones.

El servicio de excursiones está concesionado y el Parque se debe recorrer con guías y en los vehículos de la empresa.

Existe área de acampe (no hay árboles), excelentes sanitarios, restaurante y las posibilidades de recorrer el sector son: excursiones guiadas en bicicleta, caminatas y dos recorridos en vehículos: 2 1/2 hs ( $ 25) y 3 1/2 hs ($ 35).

Elegimos la opción del recorrido largo. Viajamos en una camioneta Toyota doble cabina y con asientos en la caja,  que además está cerrada con vidrios y tiene techo para evitar el sol.

Tenía una falsa idea respecto a Talampaya ya que pensaba que solamente podría pararme frente a una hilera de  paredones muy altos.

En la excursión se visitan pinturas rupestres y se recibe una explicación detallada sobre las culturas indígenas que habitaron la zona.

Se transita a lo largo de todo el cañón, incluyendo paradas frente a la "Chimenea", pared muy lisa con una altura de 150 mts.  

Realmente no hay fotografía que pueda dar una idea de ese tamaño: hay que pararse ahí abajo y mirar para arriba para poder tomar real conciencia.

En una de las paradas, varios cóndores nos dieron la bienvenida.

Existen varias formaciones pétreas con formas características y que son motivo de visita: 

El TOTEM ...

LA TORRE ...

LA BOTELLA y EL MONJE...

La excursión de tres horas y media continúa avanzando por el lecho seco del río hasta llegar a otro cañón, cuyo ancho por momentos es de 8 mts y con una altura de pared superior a los 110 mts. Es un lugar con más vegetación y se hace una caminata entretenida de más o menos 1 km entre ida y vuelta.  

En fin, si bien hicimos este recorrido entre las 10:00 hs y las 14:00 hs, no hemos sufrido mayormente el calor y la distancia recorrida fue de más o menos 60 km.

La atención y los servicios de guiado y transporte son excelentes.

Recomiendo ampliamente efectuar la visita a Talampaya.

Decididos a visitar el Valle de la Luna en el mismo día, partimos raudamente por la ruta 76 rumbo  a Ischigualasto, distante 93 km.

Desde la ruta vimos las sierras en las cuales está el Cañon de Talampaya.

Ingresamos a la provincia de San Juan y abonamos la entrada al Parque que se recorre en caravana utilizando el vehículo propio. Las visitas son guiadas por un guardaparque que viaja en el primero de ellos.

En el Parque existen tres áreas claramente diferenciadas ya que tienen distinta antigûedad y la caravana se detiene cinco veces para recibir las explicaciones del caso.

Empezamos nuestra visita a las 15 hs y el calor se hacía sentir, máxime cuando debíamos descender del Kangoo y abandonar el aire acondicionado aunque se soporta sin inconvenientes.

En la primera estación se recibe una explicación general del Parque, los períodos geológicos involucrados, etc.

En sucesivas detenciones se observa el Valle de la Luna propiamente dicho que se encuentra en el lecho de lo que alguna vez fue un río y que tiene más de 20 km de longitud.

Las formas caractéristicas se hacen presentes y aparece La Esfinge.

Una caminata de varios cientos de metros nos lleva  a la llamada "Cancha de Bochas", en la cual están dispuestas piedras perfectamente redondas.  

Una desilusión: las piedras son originales pero la disposición fue hecha por los guardaparques para poderlas preservar de los saqueos de los visitantes.

Por último, en la cuarta y quinta detención se visitan las formaciones pétreas características y que aparecen en toda la folletería:

"El Submarino" .....

y "El Hongo".

Algunas personas recomiendan visitar primero Ischigualasto y luego Talampaya ya que dicen que éste último es más impresionante y en caso de visitarlo como lo hicimos nosotros, el Valle de la Luna no llama tanto la atención.

Creo que deben considerarse por separado y disfrutarlos cada uno por su lado.

También debo aceptar que las mejores horas para visitar Ischigualasto son por la mañana temprano o al atardecer cuando los rayos de sol llegan en forma oblicua y generan sombras. La fotografía no deja de ser el correcto manejo de las luces y sombras.

También existen excelentes sanitarios, restaurante y venta de artesanías.

Hay un museo al cual se puede acceder con el ticket que se abona para la visita del Parque, en el cual un guía de la Universidad de San Juan, nos brindó una explicación magnífica respecto al trabajo de recuperación, clasificación, averiguación de modos de alimentación, causa de muerte de especies encontradas en la zona (especialmente dinosaurios).

Felices por haber visitado los dos Parques, volvimos a Villa Unión para pernoctar.