EL SOSNEADO - VALLE HERMOSO (frustrado) - SAN RAFAEL
Al
día siguiente, viernes, nos propusimos ir a dormir con la carpa a un lugar
paradisíaco y que hace honor a su nombre: Valle Hermoso.
Imagen satelital de la zona de valles de Los Molles, de Las Leñas y Valle Hermoso (click para agrandar) |
Este
valle se encuentra hacia el oeste del Valle de Las Leñas y se accede solamente
en verano cuando la ausencia de nieve lo permite.
Otra
vez tomamos la ruta 40 y doblamos por la ruta 222.
Antes
de llegar a Los Molles está el nuevo puente peatonal que permite cruzar para
visitar la Laguna de la Niña Encantada. Ya la conocíamos y en esta oportunidad
seguimos de largo.
Entre
Los Molles y Las Leñas, un cartel señala la playa de estacionamiento que
permite acercarse al Pozo de las Ánimas.
En
realidad son 2 pozos profundos, separados por una delgada pared y que contienen
agua dulce. Esa formación geomorfológica recibe el nombre de “dolinas”. La
acción del viento produce un sonido parecido al de un silbido grave y de ahí
su nombre.
Durante
el invierno, con un paisaje cubierto de nieve, el lugar es muy bello.
Llegamos
a Las Leñas e hicimos una corta parada que aprovechamos para comprar algunos
comestibles en el supermercado, averiguar el estado del camino de ripio que
lleva a Valle Hermoso, el costo y comodidades para hacer camping allí y también,
pensando en la vuelta, el precio
del alojamiento en el Centro
Invernal.
Con
el Duna, a fines de los 90, conocimos Valle Hermoso pero fuímos y vinimos en el
día.
Dejamos
atrás Las Leñas y comenzamos a transitar el ripio que, al contrario de los que
figura en algunas guías, encontramos apto para cualquier vehículo.
Se
cruzan varios vados que no tienen corriente y cuya profundidad no creo que
supere los 30 o 40 cm.
El
camino comienza a ascender progresivamente. Pasamos la zona conocida como
Cuchilla de los Entumidos, donde a veces existen manchones de hielo aún en
verano. Tiene este nombre en recuerdo a puesteros que sorprendidos por una gran
nevada buscaron refugio en una especie de cueva donde fallecieron congelados.
Más
adelante se pasa por la zona conocida como Cerro de los Fósiles, donde pueden
encontrarse piedras con la impronta de moluscos y plantas, que indicarían que
la zona estuvo cubierta de agua.
Al
frente se observa a los lejos el Volcán Peteroa vecino al Portezuelo de El
Planchón, zona por donde debería haber cruzado en su ruta hacia Chile el Avión
de los Uruguayos.
El
camino se hace más angosto y circula sobre una cornisa a más o menos 3000
msnm.
A
la derecha se abre un camino, actualmente interrumpido,
que se dirige hacia el Paso de las Damas. Suelen organizarse cabalgatas
hacia ese Paso.
Mientras
circulábamos por la cornisa, disfrutando del paisaje, sentimos un ruido muy
fuerte en la parte de atrás del Kangoo. Le resté importancia pensando que se
trataba de la carga que se acomodaba en el baúl.
Luego
de recorrer algunos cientos de metros y viendo que el ruido no cesaba, paramos
para ver si detectábamos cual era el objeto que estaba haciendo semejante
bochinche y eventualmente reacomodarlo.
Por
las dudas me agaché para mirar la parte trasera e inferior del auto y rápidamente
encontré al culpable: se había desprendido un amortiguador trasero y faltaba
el bulón que aseguraba la cazoleta inferior al chasis, por lo cual estaba
colgado desde la parte superior, bamboleándose para todos lados.
Justo
allí, un viernes después de las 14 hs, a 3000 msnm y habiendo perdido el bulón.
Era momento de decisión: las alternativas eran atarlo con alambre y continuar
hacia Valle Hermoso o volver sobre nuestros pasos hacia Malargüe o San Rafael
para intentar cambiarlo.
En
eso estaba cuando Nora, mujer con mucha fé,
haciendo caso omiso a mi pesimismo, empieza a recorrer el camino hacia
atrás. Después de caminar más o menos 100 mts la veo agitando los brazos y
cuando nos reunimos me pregunta : ¿ Esto es lo que buscamos ?. Allí estaba,
triunfante, con el bulón en la mano.
Aseguramos
el amortiguador sin problemas a pesar que la cazoleta se había deformado.
Continuamos
viaje ya que es difícil dar la vuelta en esa cornisa y unos pocos kilómetros más
adelante está el mirador de Valle Hermoso, lugar que además de tener una vista
impresionante hacia el fondo del valle, tiene lugar de sobra para estacionar vehículos
y girar.
Vista del Valle Hermoso desde el Mirador. En primer plano la formación rocosa conocida como el "Centinela" y el camino sinuoso que baja hasta la laguna. Al fondo se encuentra el Volcán Peteroa |
Sacamos
unas cuantas fotos y como todavía teníamos la idea de incluir en nuestro
periplo el norte de la provincia del Neuquén, decidimos que esa misma tarde
volveríamos a San Rafael para cambiar los amortiguadores antes de la hora de
cierre de la concesionaria Renault.
Eran
más o menos las 15 hs cuando partimos y a las 18 hs el Kangoo ya tenía
amortiguadores nuevos. Con mirada retrospectiva pienso que el viaje a la Laguna
del Diamante, con sus 36 km de serrucho, fue el culpable del percance, sumado
ello a que en alguna oportunidad había escuchado una vibración en la parte
trasera que siempre atribuí a ruídos en la carga.
Esa
tarde la sensación térmica en San Rafael era sencillamente infernal: casi 40
° C y con presencia de viento zonda.
Estábamos
cansados y muertos de calor: con la libertad de improvisar a cada instante,
decidimos rumbear para el Cañón del Atuel a pasar la noche en algún camping
con pileta.