PUNTA NORTE LAGO DEL DESIERTO
Obviando
detalles que escapan al espíritu de este relato, el mediodía nos encontró con
el KANGOO rumbo al Lago. Rápidamente preparamos las mochilas con comestibles,
calentador, sol de noche portátil, bolsa de dormir y ropa de abrigo. Dejamos el
auto en el cámping.
Cerca de
las 14 hs, nos encontrábamos cumpliendo otro de nuestros deseos, hasta ahora
incumplido: conocer la Punta Norte.
La
navegación fue muy rápida y con muy pocos “sacudones”. El paisaje, sobre
todo mirando hacia el oeste, espectacular. Los cerros tienen hielos eternos que
sólo se ven desde la mitad del lago debido a su forma alargada.
La cara norte del Fitz se ocultaba entre las nubes.
En la punta Norte está el Grupo “Lago del Desierto” de Gendarmería y al lado del destacamento existe una cabaña muy grande con una vista soberbia hacia el lago.
Grupo "Lago del Desierto" de la Gendarmería Nacional en la Punta Norte. La línea blanca en el cielo corresponde al paso de un avión |
Los chicos
aprovecharon para jugar con “Calandraca”, el perro que acompaña a los
gendarmes.
Pablo y el perro "Calandraca |
Otra vez
la suerte estaba de nuestro lado: cuando empezó a caer el sol el Fitz se mostró
descubierto y las nubes tomaron su clásico color naranja para permitirnos
disfrutar de un atardecer inolvidable.
Atardecer sobre el Lago del Desierto. Al fondo se observa el cerro Fitz Roy |
Nos
alojamos en la cabaña, que dispone de energía eléctrica a partir de una
turbina hidráulica interpuesta en el arroyo que desemboca en el lago.
La turbina
estaba en reparación por lo cual cenamos alumbrados por nuestro farolito a gas
y la luz de varias velas. Momentos mágicos.
Vista del atardecer desde la cabaña. El reflejo del cuadro se incluyó de ex-profeso para marcar la diferencia respecto al paisaje que se ve por la ventana |
Las camas
tenían sus respectivos colchones y sobre ellos tiramos nuestras bolsas de
dormir.
Las
ampollas iban de mal en peor y a pesar de estar en ojotas, ambos pies se
hincharon con síntomas de infección.
El premio
para los madrugadores es presenciar otro momento mágico: la salida del sol.
Mientras el resto de la familia dormía, me preparé un desayuno mientras el sol
bañaba con sus primeros rayos al Fitz y sus agujas. El día se presentaba
hermoso y sin viento.
Aprovechamos
para caminar por la orilla del lago y tomar sol. No pude caminar hasta la Laguna
Amarga, distante 5 km y ubicada sobre el límite internacional.
Vista de la cara norte del Fitz Roy desde la Punta Norte del Lago del Desierto |
En horas
de la tarde, luego del almuerzo y la siesta, nuevamente por medio lacustre
volvimos a la Punta Sur.
Ya me
preparaba para sacar el filtro de aire y recurrir al aerosol, pero no fue
necesario. El KANGOO arrancó al primer intento.
Las
ampollas me tenían realmente mal, mucho dolor y el clásico “latido”,
propio de la infección.
Alojamiento
en las Cabañas Austral y nueva visita al Puesto Sanitario.
Curaciones
de rigor y nueva prohibición de caminar. Esta vez estaba dispuesto a cumplirla.
Luego de la cena tomamos el café en "Patagonikus". Es un local nuevo que funciona como bar, restaurante y pizzería.
Pertenece a
la nieta de Cesarino Fava, famoso escalador italiano que anduvo por la zona
intentando el Torre junto a Césare Maestri y Toni Egger.
Sobre la
pared hay fotos históricas de las primeras expediciones que intentaban los
cerros de la zona (1959).