ETAPA 9
Tolar Grande - Calama (Chile)
Viernes 22 de febrero
Algunos mapas para seguir el recorrido de esta jornada ...
Otro día que amanece espléndido.
Ya habíamos decidido que no iríamos a la Mina Arita ni a La Casualidad y solamente nos quedaba una alternativa: retornar con rumbo este.
Desayuno, acomodamiento de bártulos y carga de combustible previa compra de vales en la “Muni” (así le dicen los lugareños a la Municipalidad, omnipresente en sus vidas). El combustible se almacena en tambores, se extrae con bombas manuales y mediante balde y embudo se carga en el vehículo.
Desde el Google Earth Tolar se ve así ...
Recorrimos el pueblo sacando algunas fotos.
En casas antiguas como la de la foto precedente se nota que para su construcción se utilizaron materiales extraídos del Salar.
Al fondo, con la bandera en la puerta, está el Complejo Polideportivo y en la casa donde hay dos tambores en la vereda funciona el comedor de Doña Teófila.
La capilla de Tolar Grande estaba cerrada ...
La plaza, al igual que la mayor parte del pueblo, tiene vista al Salar ...
Nos fuímos a ver la estación y alrededores ...
Todavía quedan estacionados algunos vagones de pasajeros y de carga. Se nota que era una estación importante.
Unos días después de regresar a casa nos enteramos que un convoy que está inspeccionando el trazado del C-14 ya había atravesado el Viaducto La Polvorilla. Tal vez cuando se lea ésto en Tolar estén celebrando que nuevamente corre el tren.
Una casa que podría estqr deshabitada como muchas de este pueblo muestra a través del humo que en su interior hay vida ...
Una última mirada a Tolar ....
Continuamos viaje, ahora desandando el camino, con menos prisa y sin incertidumbre respecto a su transitabilidad, disfrutándolo más.
¿ Hasta dónde viajaremos hoy ?. En ese momento no lo sabíamos pero puedo anticipar que a la postre terminó siendo una jornada muy pero muy larga.
Viajamos paralelos al Cordón del Macón al que atravesamos por una quebrada.
Subimos al Abra Navarro y dejamos atrás el Salar del Diablo ...
Cruzamos el Desierto del Diablo, lugar hermoso si los hay ...
Pasamos raudamente por el Campo de la Paciencia y después de una recta de varios kilómetros atravesamos, por tercera vez en este viaje, el poblado “Estación Salar de Pocitos”.
Continuamos hasta Cauchari, hoy limitado a ser un nudo de caminos.
Desde allí se puede seguir por la ruta 70 que va bordeando el Salar de Caucharí y, si bien en SAC me la habían recomendado, una charla con los guías de turismo que estaban en Tolar Grande me convenció de no tomarla ya que las lluvias de verano lo habían dejado intransitable para el Kangoo.
Decidimos que iríamos a conocer el Paso de Sico y allí veríamos si cruzábamos a Chile o nos volveríamos sobre nuestros pasos. Descartada la ruta 70, existían ahora dos alternativas: tomar un camino que pasa por el pueblo de Catúa y luego empalma con la ruta 51 que va a Sico o tomar directamente la 51, sin pasar por Catúa.
Desde Catúa sale un camino que lleva hasta el paso de Huaytiquina, hoy deshabilitado. Tenía intenciones de visitarlo ya que había visto fotografías del recorrido que hicieron los muchachos de Latitud-Cero con sus bicicletas.
En concreto, tomamos la 51 hasta Sico. Si bien el camino es muy ancho y la distancia hasta el control fronterizo es de más o menos 50 kilómetros, su estado era desastroso.
Por momentos hay tramos, por suerte cortos, muy arenosos pero durante la mayor parte del tramo el serrucho reina sin competencia al extremo que debía circular con la mano sosteniendo la palanca de cambios porque si viajaba con la segunda marcha, recorría pocos metros y saltaba a punto muerto.
El paisaje interesante lo tenemos a nuestra izquierda ya que la ruta corre bastante más alto que la superficie del Salar del Rincón.
Vemos un camión con acoplado que circula por algún camino de los que cruza la superficie salina ...
Se observan explotaciones mineras ...
Las líneas de alta tensión siguen el trazado de la ruta.
Maldiciendo al serrucho, a las autoridades provinciales y a todo posible responsable que me viniera en mente, seguimos avanzando bajo un sol fuerte. Como siempre, el mediodía nos sorprende “en medio de la nada”.
De derecha a izquierda, otra vez a derecha, por momentos por el medio, pero siempre despacito y soportando un traqueteo infernal que solamente se interrumpía cuando paraba a sacar una foto.
Hacia la izquierda el paisaje es muy lindo.
A lo lejos y todavía borroneado se empieza a distinguir el complejo fronterizo ....
El centro de fronteras es un edificio moderno, ocupado por autoridades de Gendarmería Nacional y la Administración de Aduanas.
Mates de por medio, charlamos con los funcionarios.
Nos ofrecieron quedarnos a dormir allí, dado lo avanzado de la hora pero, tomando una decisión equivocada, decidí seguir adelante hasta San Pedro de Atacama (SPA).
Esto nos obligó a imponer un ritmo de marcha más veloz que el deseable para disfrutar de un paisaje cada vez más lindo.
Partimos raudamente ...
El centro de frontera visto desde el camino al hito fronterizo ...
Una última mirada al Salar del Rincón ...
A los 11 km nos encontrábamos frente al arco, que en medio de la nada, indica el límite internacional (4100 msnm). El viento frío soplaba muy fuerte.
Una mirada hacia nuestro país, al cual dejamos a nuestras espaldas ...
Todavía nos faltaban 200 km hasta SPA.
En territorio chileno y a nuestra izquierda aparece la salina "El Laco ...
En medio de una fuerte pendiente vemos la silueta de las instalaciones fronterizas chilenas ...
A 20 km del Paso y a orillas de la Salina del Laco,se encuentra la Avanzada de Carabineros “El Laco”. Estamos a más o menos 4300 msnm.
Fuímos muy bien atendidos y en pocos minutos continuamos viaje.
El camino sube pronunciadamente lo que nos obliga a transitar algunos kilómetros en primera marcha hasta poder salir por la parte más baja, a la izquierda de la siguiente foto. Allí tocamos los 4500 msnm.
Pasamos una minera ...
... y al poco tiempo estamos transitando junto a la Pampa Amarilla y a la derecha la laguna Tuyajto.
Nos hubiera gustado detenernos pero la incertidumbre respecto del estado del camino y la sensación de haber partido muy tarde nos hizo continuar.
Sugiero que el tramo en cuestión se inicie por la mañana para poder disfrutarlo sin tener que correr una carrera contra la llegada de la noche. Es un paseo muy lindo y creo que merece dedicarle un día, sobre todo si es aficionado a la fotografía.
En toda esta zona viajamos por sobre los 4000 msnm y si uno mira el mapa de Viajeros4x4 notará que los picos y volcanes vecinos superan largamente los 5000 mts.
A nuestra izquierda aparece el Salar del Talar.
Continuamos en medio de un paisaje dominado por los conos volcánicos del Miñiques (5700 msnm) y del Miscanti (5592 msnm) y las lagunas homónimas, a las cuales no pudimos entrar. Viendo fotos de otros viajeros notamos con dolor la belleza que nos perdimos de disfrutar aunque, como siempre, después vemos que el próximo pueblo, Socaire, donde empieza el asfalto estaba muy cerca. De última podríamos haber pernoctado ahí, sin seguir a SPA.
Llegamos a Socaire.
| Socaire es un pueblo localizado en la segunda Región de Antofagasta a 3500 metros por sobre el nivel del mar, 25 kilómetros de Camar, 86 kilómetros de San Pedro de Atacama y a 402 kilómetros al este de Antofagasta, además, es el último pueblo Chileno cuando uno se dirige hacia Argentina, a través del Paso Sico. Socaire es un lugar
muy especial, conocido por sus pequeñas casas sin ventanas. Debe su importancia
tanto como principal mirador del salar como también por su artesanía.
Los tejidos tradicionales de lanas de ovinos y camélidos, son un ejemplo
de ello. La aldea además, cuenta con un albergue para los visitantes que
es atendido por miembro de la comunidad. Dentro de sus construcciones históricas se encuentra el templo hispánico colonial y su torre campanario de piedra canteada. En sus cercanías se
encuentra el mineral de hierro "El Laco" alcanzando luego el "Paso de
Sico". çLa
fisonomía del pueblo es única ya que se encuentra montada sobre una
ladera con buen declive; un canal de agua baja por el costado sur y
antes de encontrarse con el camino Internacional dobla al este
perdiéndose en la quebrada vegetada después de haber irrigado las
pequeñas eras en la superficie de la parte sur de Socaire. Muy cerca se
puede encontrar también las lagunas Miscanti y Miñiques con grandes
truchas asalmonadas. Como pueblo cristiano, Socaire celebra su día festejando a su Santo Patrono "San Bartolomé" el día 24 de agosto. Celebran también "La limpia de canales" el 14 de octubre. Las mujeres Socairinas tienen su industria artesanal en tejidos a mano con una gran variedad de prendas. El agua para su
consumo es de muy buena calidad y la obtienen de algunas vertientes
cercanas. Tiene escuela Básica con profesores dependientes de la
municipalidad de San Pedro de Atacama.
|
Dimos una vuelta por el pueblo y aprovechamos a vaciar un bidón de gasoil en el tanque del Kangoo.
Una vista parcial del Google Earth permite ver las terrazas con cultivos ...
Partimos, con un espléndido asfalto, rumbo a Toconao.
Hacia la izquierda está el Salar de Atacama y a la derecha vemos una sucesión de cerros y volcanes, todos superiores a los 5000 msnm. Entre ellos: Volcanes Lejía, Chilques y Cenizas.
Cruzamos el Trópico de Capricornio (2500 msnm).
Siguen apareciendo los picos que se destacan de la planicie: Cerro Corona, Volcanes Láscar (activo), Aguas Calientes, Acamarachi, Pili, Laguna Verde, Colochi, Hécar, Potor y Rayado.
Se suceden los pueblos a un costado de la ruta ...
Divisamos Toconao desde la ruta ...
Entramos a Toconao.
| El nombre
Toconao significa lugar de piedras, y viene de las palabras kunza
tocknar, que significa piedra, y ao, lugar. Los toconares
luchan actualmente para que el estado chileno apruebe el convenio 169 de
la OIT sobre derechos que les asisten a los habitantes y sus
descendientes sobre comarcas y territorios ocupados de manera ancestral
y bajo la ley natural no escrita.
Sus frutos de
destacan por su alto contenido de ácido ascórbico (vitamina C) que se
debe a sus tierras agrícolas regadas por ríos de menor caudal
provenientes de la cordillera y que desembocan en el Gran Salar. Frente a su plaza
se ubica la Iglesia y Campanario de San Lucas, que datan del siglo XVIII,
estos aunque fueron reconstruidos después de terremotos e incendios,
conservan su encanto original y de lo cual el pueblo se siente
orgulloso. ambos fueron declarados Monumento Nacional. Son cuidados
actualmente por la congregación de monjas de la orden Jesús Verbo y
Víctima. La actividad del
pueblo se basa en la talla de diversas esculturas de piedra volcánica, y
miniaturas de los mismos, que, son extraídas de una cantera propia de la
Comunidad Indígena . En forma de
costumbre heredada, se cultivan los huertillos familiares pertenecientes
a los comuneros, Otra parte de la población trabaja en la minería no
metálica de las explotaciones del gran salar, entre otros extracción de
litio, bórax, yodo, salitre etc. explotadas por la empresa SQM y con la
cual la comunidad ha mantenido negociaciones y conflictos relacionados
con las aguas y la sobreexplotación que puede sufrir el salar, lo cual
haría peligrar la fauna nativa del sector y que esta fuertemente
arraigada en las ceremonias y compromiso ecológico y de supervivencia en
el futuro de otros proyectos de la comunidad. Toconao se destaca
por el ordenamiento que le dieron los antiguos pobladores a su pueblo y
la cultura heredada del cuidado de las especies y medioambiente. Es un
pueblo construido enteramente de piedra liparita que entre sus bondades,
mantiene temperado el interior, independiente de la estación climática. Los animales para los lickanantai, son sus hermanos menores; el agua es su hermana, la tierra su vientre natural, este tipo de educación cultural es traspasada religiosamente de padres y madres a sus hijos y así sucesivamente de generación en generación. |
Entramos a la Iglesia de San Lucas ...
Dimos una vuelta por el pueblo, conocimos su iglesia y al atardecer partimos para SPA, distante más o menos 40 km.
A lo lejos se divisa la ruta que conduce hacia Argentina a través del Paso de Jama ...
Se obtienen vistas del imponente Vn Licancabur, de cono perfecto y 5916 msnm cuyas imágenes pondremos en otras etapas.
Llegamos a San Pedro de Atacama al atardecer y fuimos a recorrer el poblado en busca de alojamiento.
En este punto es donde confluyeron todas las desventajas posibles: viernes a la tarde, mucho miniturismo, febrero es el mes pico en el turismo de Chile, aeropuerto en la ciudad de Calama adonde llegan vuelos internacionales y de cabotaje, extremadamente cansados por un día agotador y haber viajado con estrés por haber partido tarde de Sico. En resumen: un caos.
Los únicos dos lugares donde podíamos alojarnos nos pedían fortunas y el camping estaba saturado de gente.
Con mucha bronca y cansados de parar a solicitar alojamiento (no se puede detener el auto en cualquier lugar) decidimos desandar camino y partir hacia la ciudad de Calama, a 95 km.
¿ Porqué pensamos en Calama ?. Habíamos consultado una guía Turistel vieja y allí figuraba que desde esa ciudad partían las excursiones a la mina de Chuquicamata y a los Géiseres del Tatio, dos lugares que queríamos conocer.
Desconociendo el camino y muy cansados partimos pasadas las 2200 hs.
El viaje se hacía interminable.
Llegamos a Calama y vimos un hotel a la entrada que imaginamos demasiado caro ( **** o *****) y decidimos ir hacia el centro de la ciudad. En las afueras y en un lugar que no me inspiraba confianza se prende la luz de reserva de gasoil pero no quisimos detenernos a poner el otro bidón por miedo a algún robo. Disculpas a los hermanos chilenos pero a nuestro favor cuenta que veníamos del conurbano bonaerense.
Llegamos al centro y otra vez el infortunio. Todos los hoteles estaban llenos porque los mineros de Chuquicamata estaban viviendo en la ciudad por algún motivo de relocalización de viviendas. ¿ Y ahora ? .
Por suerte el conserje de uno de los hoteles efectuó una llamada y nos consiguió las últimas dos habitaciones del hotel de lujo que descartamos a la entrada.
Dijimos que SÍ y sin importarnos cuanto nos cobrarían.
Pasada la medianoche y sin cenar, caímos rendidos en las confortables camas del hotel “Agua del Desierto” ...
Mañana sería otro día.
